jueves, 16 de diciembre de 2010

la chocolateria de anabel



el otro día hablando con un amigo sobre mi próximo viaje, me recomendó que fuese a este sitio. ellos estuvieron el año pasado y guardan un recuerdo muy especial del ambiente, la comida y sobre todo de la gente que allí se reune.
después de ver las fotos no va a hacer falta que nadie insista para que vaya.
el edificio parece sacado de un cuento, el entorno impresionante, y el chocolate tiene una pinta...
iré, si o si.

3 comentarios:

  1. la chocolatería de anabel (II)

    quieres esconderte detrás del mostrador sin dejar de mirar cada uno de los dulces que poblaban aquella estantería. todos imperfectos, delicadamente desordenados formando una sinfonía de colores y olores difícil de catalogar.
    - deberás elegir.- te dice con una amable sonrisa mientras limpia sus manos en el mandil, sabiendo que elegir es lo más difícil en la vida.
    cada elección supone automáticamente una renuncia, un juicio y un análisis en orden inverso aunque no necesariamente esta secuencia es la que utilizamos habitualmente y es por eso que no hemos aprendido a hacerlo en condiciones.
    - acércate y dime cual quieres.
    la primera opción que pasa por tu cabeza es la de pedirle que te ponga la estantería entera y dar cuenta allí mismo de todos los dulces que puedas y el resto llevártelos envueltos en una bonita caja de cartón. sin embargo, no tienes hambre y te gustaría saborearlos porque ¿de qué sirve comerlos uno detrás de otro por el simple hecho de no saber elegir? llevártelos tampoco es una opción porque no te sabrán igual allá donde vayas. la magia está ahí y tu lo sabes.
    te acercas un poco embriagada por los colores y las formas que decoran la estantería; tus ojos rápidamente se fijan en un par de dulces cubiertos de varios chocolates colocados sobre un papel amarillo limón, tienen forma de mariposa, o tu decides que la tienen. te acercas un poco mas para intentar saber si ese olor que te llega les pertenece pero tu olfato te lleva a otro rincón donde una extraña mezcla de canela y otro aroma que no sabes reconocer hace que declines las mariposas a favor de unos sencillos cuadradillos tostados.
    miras de soslayo a anabel que te mira con ternura. no eres capaz de pronunciar palabra pero ella los toma delicadamente y te los sirve en un pequeño platillo decorado con flores. parece chino pero ella te dice que no, que está fabricado y pintado a mano en chile por unos amigos suyos.
    le pides un té aromático pero ella te sirve café. te mira divertida y te explica que esos dulces no van bien con el té, que una elección lleva implícita otras muchas que no somos capaces de valorar con la primera.
    sonríe.
    con el primer bocado te sorprende la textura. tampoco la habías tenido en cuenta, sin embargo también la habías escogido de alguna manera… el sabor si se parece al que habías imaginado y lo disfrutas como no habías disfrutado un dulce antes.
    le sonríes. solo te queda una pregunta pero ella se adelanta.
    - no, no te has equivocado. nunca nos equivocamos por tomar una decisión. el error es no tomarla. y en caso de tener duda.- te dice mientras se despide en la puerta.- siempre puedes volver otra vez y probar suerte de nuevo.

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  2. ai ama, que buenoooo!!! tengo un comentario!!!! bueno, tengo dos!!!! quedan escondidas con el fondo porque es del mismo que el texto.
    me encanta. gracias!!!!!

    vamos a jugar...!

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  3. http://www.youtube.com/watch?v=JO7yWrTg-0U

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